Bautizo bloguero

A mí cuando me hablan de blog me venía a la mente , salvando las diferencias ortográficas, las libretas de espirales y anillas que usaba en el colegio para hacer los deberes.

Yo, que siempre he intentado resistirme a las innovaciones tecnológicas más por inutilidad que por convicción, me veo cada día más inmerso en la vorágine que suponen e implican las redes sociales, la navegación por internet, los términos tan raritos que se usan (en mi desconocimiento pienso que es una lástima no aprovechar el castellano con lo bonito que es nuestro idioma) y todo resto de contratiempos, impedimentos vericuetos que encierra este dichoso mundillo de las tecnologías.

Un hastag, un retweet, un unfollow…queeee barbaridad…Me vais a disculpar pero donde se ponga una buena tortilla de patatas que se quite lo demás.

Aclarado, o quizá no, ésto, espero que disfrutéis de lo que aquí iré reflejando y que intentéis hacer acopio de paciencia y comprensión si en algo me equivoco o no soy del agrado de alguien. Intentaré cuidar las formas porque tampoco me veo yo abanderando nada.

Sed bienvenidos a esta página de vuestro amigo Santi. Aquí estamos, como siempre que puedo, a vuestra disposición para atenderos en la medida de mis posibilidades.

No puedo dejar de dar las gracias, porque me tengo por bien nacido, a todo el equipo de Interqué, responsable de que esta web sea posible con sus defectos y sus virtudes y en especial a mi paisano y amigo Raúl Ordóñez por su cariño, atención y dedicación hacia este trabajo que presentamos hoy ante vosotros…con gente como él uno entiende por qué nuestra tierra es tan especial y distinta a cualquier otra.

Eso sí, como siempre, se aceptan todo tipo de comentarios, rectificaciones, recomendaciones pero si vienen con respeto y educación…tengo el defecto de intentar ser humilde, educado y respetuoso y me vais a permitir que demande lo mismo por vuestra parte.

Un saludo con mucho cariño.