Montse y Zaki, Zaki y Montse…tanto monta, monta tanto.
Cuando uno empieza un proyecto solidario las ilusiones y los objetivos son muchos pero, en ocasiones, la realidad le baja a uno los humos buenos y, en ocasiones también, acaba uno por rendirse.
Pues nada más lejos de la realidad. En este caso tengo la inmensa suerte, y en consecuencia la tiene también la Asociación Síndrome de Down de Jaén y Provincia, de contar con dos personas sin las cuales sería materialmente imposible llevar a cabo absolutamente nada de lo que tiene lugar y ocurre a lo largo de todo el fin de semana en que se desarrollan todas las actividades del Festival Santi y sus amigos.
Esas dos personas son Montse y Zaki o Zaki y Montse…como os guste más.
Zaki Al-Kathib Diez, al igual que Montse, se embarcó en la nave del festival desde el minuto 1. Sin él no habría carteles, diseño, videos de la gala, organización técnica…
Una buenísima persona que tengo la suerte de tener por amigo y compañero para sacar adelante este proyecto. Un corazón que no le cabe en el pecho dispuesto a echar las horas que hagan falta para que vea la luz, cada año, a contra reloj, pero con la misma ilusión del primer día, el cartel que anuncia una nueva edición del festival.
En mi caso sólo tengo palabras de agradecimiento a todo en lo que he tenido la fortuna de tenerlo a mi lado (incluyendo los diseños de los flyers de mis espectáculos) y de reconocimiento a un profesional más grande si cabe por su implicación solidaria y nivel humano.
En el caso de Montse Rosés Mesa se me acabarán los adjetivos sobre ella y seguiré quedándome corto.
No he oído nunca un “no”, un “pero”, ni un mal gesto…todo son facilidades, para todo hay una solución…Si yo tuviera que redactar su curriculum, en el apartado de “capacidad de trabajo” pondría “increíble e insuperable”.
Nadie, incluído yo, sabe el volumen de detalles que hay que tener previstos y solucionados para llevar a cabo un festival de esta envergadura. Viajes de artistas, desplazamientos, contingencias del día de convivencia y deportes, confirmación de patrocinadores, agenda informativa para los que participamos activamente, comunicaciones a los responsables de cada cosa, ruedas de prensa…
¿A que cansa sólo con leerlo? Pues quedan mil apartados más y cada apartado con mil detalles y resquicios que Montse, sin nadie más, se encarga personalmente de resolver y tener preparado para cuando llega el fin de semana.
Pues a todo esto hay que añadir la mejor parte que a veces no siempre va de la mano. Son dos excelentes profesionales, doy fé de ello, pero lo mejor es la calidad humana que tienen. La amabilidad, la implicación, la solidaridad con la que actúan ante todo lo que se presenta a la hora de comenzar una nueva edición.
Ellos entraron en el barco desde el minuto 1. Yo, en este sentido no tengo tanto mérito (tenga el mérito que tenga) que puedan tener ellos ya que la idea y el sueño era propio pero a ellos se lo presentaron delante de sus narices y lo han asumido como si la idea hubiera salido de su mente y desearan, por ser suya, llevarla a cabo.
Son gente maravillosa que ha absorbido el espíritu del festival, han entendido a qué había que jugar y se mueven entre las reglas del juego siendo los galácticos que todo el mundo quisiera tener en su equipo y que tengo la fortuna de haber conseguido yo.
Que nadie dude que yo soy la cara (fea, ya lo sé jejeje) del festival pero que sin estas dos grandes y bellas personas, todo lo que va a ocurrir hoy y mañana, como cada año que repetimos experiencia, sería inviable; no habría manera de llevarlo a cabo.
Trabajo usando la palabra pero, en momentos como estos, donde tengo a personas de tantísimo nivel no encuentro el recurso preciso para decirles otra cosa que…
Gracias Montse, gracias Zaki.
Gracias Zaki, gracias Montse.
Ya sabéis lo que os quiero.
Comentarios
Que bonitas palabras.
Y muy ciertas, son dos grandes profesionales y más grandes aún como personas.
Enhorabuena!
Una varita mágica… no lo haria mejor que vosotros.